Los problemas de salud mental, como la depresión, pueden tener un impacto grave en la salud si no se reconocen y curan a tiempo. Mucha gente no presta atención a tales problemas ya que no los consideran como un 'PROBLEMA'. Sin embargo, hay uno de esos startup- Thymia que evalúa y monitorea la depresión con la ayuda de videojuegos.
Recauda fondos previos a la semilla
en el Reino Unido healthtech startup timia ha recaudado una financiación de 780 libras esterlinas/1.1 millones de dólares (924 euros) en una ronda previa a la semilla para escalar su plataforma para evaluar y controlar la depresión. La ronda de financiación fue codirigida por Calma/Tormenta y Kodori AG y contó con la participación de Formar empresas, empresaneur Primero, y una serie de angel investors.
Con lo recaudado, el startup planea recopilar datos adicionales para mejorar el producto Thymia y expandirlo para hacer crecer la startuptécnico y comercial teams.
El startup afirma que la tecnología utilizada por la plataforma erradica la subjetividad de las evaluaciones de salud mental, lo que básicamente significa que en lugar de responder cuestionarios, los pacientes juegan videojuegos especialmente diseñados que utilizan la neuropsicología, la lingüística y el aprendizaje automático para detectar signos de depresión, así como monitorear si los síntomas están mejorando o empeorando con el tiempo.
Thymia utiliza además su plataforma para empoderar a los médicos al tomar decisiones clínicas más rápidas y precisas al hacer que la enfermedad mental sea tan objetivamente medible como las condiciones físicas visibles.
La historia detrás de Thymia
Cofundada por la neurocientífica Dra. Emilia Molimpakis y el físico teórico Dr. Stefano Goria, Thymia se lanzó después de que una amiga cercana de Emilia comenzara a sufrir depresión. Los métodos utilizados anteriormente para curar la depresión no funcionaron de manera efectiva para transmitir la gravedad de su angustia a sus médicos, lo que finalmente llevó a un intento de suicidio.
Todo este incidente fue seguido de cerca por la Dra. Molimpakis y eso eventualmente llevó a un aumento en su comprensión de la lingüística, la neurociencia cognitiva y la psicología experimental para crear una plataforma que eventualmente podría reemplazar el enfoque altamente subjetivo basado en cuestionarios que los médicos se ven obligados a usar con pacientes que experimentan dificultades de salud mental. Thymia afirma proporcionarles un proceso preciso y más rápido para evaluar y controlar la depresión mayor.
“Thymia nació cuando una amiga cercana trató de quitarse la vida. Sus amigos y médicos pasaron por alto las señales de que estaba tan gravemente enferma, sobre todo porque el proceso de acceso al tratamiento adecuado se basó en metodologías obsoletas que no se ajustaban a las complejidades y matices de una enfermedad como la depresión”, dice la Dra. Emilia Molimpakis, CEO y co-fundador de la startup.
Hablando sobre el aumento de la depresión impulsado por la pandemia, agrega: “La depresión es un problema social y económico masivo y en constante crecimiento; es una de las principales causas de discapacidad y suicidios y le cuesta a la economía del Reino Unido miles de millones anuales en pérdida de productividad. COVID-19 ha agravado aún más el problema, desatando un “tsunami” de enfermedades mentales debido a la falta de citas en persona, pero también sus duros efectos sociales: aislamiento social, pérdida de empleo, duelo y dolor. De enero a marzo de 2021, la ONS encontró que el 21 % de los adultos del Reino Unido reportaron síntomas depresivos, el doble de lo observado antes de la pandemia”.
El uso de la tecnología de Thymia
Thymia utiliza actividades y desafíos al estilo de los videojuegos para que los pacientes interactúen, como describir verbalmente escenas animadas o interactuar con objetos en movimiento. Con la ayuda de la neuropsicología, la lingüística y el aprendizaje automático, estos videos detectan signos de depresión. A medida que los usuarios completan los juegos, Thymia software analiza de forma anónima tres flujos de datos clave:
- Voz: tanto cómo habla alguien como lo que está diciendo (captar señales acústicas y lingüísticas depresivas)
- Vídeo: microexpresiones y mirada (que puede ayudar a rastrear el estado de ánimo actual)
- y medidas conductuales, incluidos los tiempos de reacción y las tasas de error (que pueden ayudar a detectar la gravedad de la depresión).
Inmediatamente después de eso, el software toma nota de los patrones de datos que identifican significativamente la depresión para conocer un diagnóstico con mayor rapidez y precisión. Fundamentalmente, también mostrará si algún tratamiento (ya sean terapias o medicamentos) está funcionando. El startup afirma que esto puede ahorrar mucho tiempo y dinero.
“Thymia está llevando la psiquiatría al siglo XXI, con una plataforma habilitada para IA para el monitoreo continuo y preciso de los pacientes. Es el primer sistema de evaluación psiquiátrica objetivo, que combina múltiples capas de abundantes datos fisiológicos para evaluar la depresión y distinguir entre trastornos de presentación similar. Nuestra tecnología permitirá a los médicos evaluar y tratar la depresión antes, al tiempo que permitirá a los pacientes desarrollar una comprensión más profunda de su propia condición”, dice el Dr. Molimpakis.
Thymia revela además que está recopilando datos valiosos de cientos de sujetos con trastorno depresivo mayor y un grupo de control normativo para entrenar su IA de manera ética e inclusiva. Están eliminando los sesgos raciales, de género y de edad relacionados con los modelos de IA.
Por eso, el startup ha colaborado con institutos de investigación, incluidos UCL y King's College London, para ayudar a escalar el uso de la tecnología a otros trastornos cognitivos.