La traducción de documentos técnicos se puede describir como el pináculo del trabajo de traducción. La documentación técnica la crea un fabricante o un proveedor para facilitar que el usuario final comprenda el funcionamiento y la arquitectura de un producto o tecnología que utiliza. Cuando compra un producto tecnológico, ya sea electrónica de consumo, electrodomésticos o productos tecnológicos, estos dispositivos a menudo se envían con un manual de usuario, detalles de la garantía y otro manual llamado documento técnico.
Un documento técnico ofrecerá detalles que explican qué tuercas o pernos se deben usar o instrucciones de seguridad como la conexión a tierra. Con el derecho a la reparación ganando terreno legislativo en todo el mundo, un documento técnico se está convirtiendo en un material aún más importante en un paquete. Un documento técnico pronto se convertirá en la puerta de entrada para reparar su iPhone en home.
Dado que la documentación técnica se está convirtiendo en una herramienta tan importante, es importante que no solo sea precisa sino que también esté bien traducida. Si un ingeniero prepara un documento técnico en inglés, la versión en español o en mandarín debe ser igualmente precisa y capaz de explicar el concepto correctamente. Aquí es donde servicios de traducción de documentos técnicos como el que ofrece Circle Translations ven a jugar.
Estos servicios aseguran que el traductor técnico no solo tenga una formación completa tanto en el idioma de destino como en el de origen, sino también una comprensión integral del tema. Suelen ser hábiles en la comprensión de la terminología y son capaces de explicar el contexto con facilidad. Con eso en mente, aquí hay un vistazo a algunos de los errores comunes que se encuentran en la traducción de documentos técnicos.
Traducir el documento palabra por palabra
Este es uno de los errores comunes que se encuentran en la traducción de documentos técnicos. Un traductor podría intentar hacer una traducción literal palabra por palabra, lo que también se conoce como equivalencia formal. Este tipo de traducción dará como resultado un documento que coincida con la fuente pero que no represente el contexto correcto del documento.
La traducción de un documento técnico palabra por palabra podría conducir a un resultado final en el que el significado del producto resultante es diferente del producto de origen. Esto podría provocar daños en el equipo, fallas en el sistema u otros daños.
Ignorar los matices culturales
Otro error común que se observa con la traducción de un documento técnico, así como con la traducción de cualquier otro documento, es ignorar los matices culturales. Cada país tendrá su propia manera de expresar algo. Una expresión de uso común en los EE. UU. puede ser relevante en algunos estados miembros de Europa, pero no en todos.
Por lo tanto, se recomienda utilizar un traductor que también sea un hablante nativo del idioma de destino. Un traductor nativo conocerá el idioma mejor que un traductor que habla el idioma de destino y, por lo tanto, puede comprender los matices culturales e interpretarlos de una manera comprensible para otros hablantes nativos. Esta es la razón por la que las empresas ahora dedican una parte de su presupuesto de marketing a servicios de traducción y subtítulos.
Traductores sin conocimientos técnicos
Si bien los hablantes nativos pueden corregir la brecha en los matices culturales, es posible que no sean los adecuados para el trabajo si no tienen experiencia técnica. Con un documento técnico, es importante que el traductor conozca los fundamentos técnicos como planos de construcción, manuales de instrucciones, especificaciones de productos y otros.
Estos traductores deben poder comprender las minucias de estos términos técnicos y poder interpretarlos bien en el idioma de destino. Si bien puede traducir un documento incluso con Google Translate o cualquier herramienta de traducción de IA, un hablante nativo con experiencia técnica puede traducir el documento de tal manera que sea comprensible para todo el espectro de personas a las que se pretende llegar.
Definiendo el público objetivo
Como se menciona a lo largo de este artículo, la traducción técnica se realiza para servir a una audiencia, también denominada audiencia objetivo. Si un documento técnico está dirigido a “todos”, su impacto será limitado. Sin embargo, puede definir el público objetivo explicando su idioma, grupo de edad e incluso antecedentes académicos.
Esta reducción de la audiencia ayudará a los traductores a conceptualizar mejor su traducción. Pueden ser creativos cuando traducen para niños agregando humor o referencias a programas locales. Para una audiencia mayor, pueden ir directamente al grano y hacerlo más simple con pasos. Así, no definir el público objetivo se convierte en otro error común.
Sin respeto por las dimensiones
Otro error común en las traducciones técnicas es la falta de respeto por las dimensiones. Un traductor experto sabría qué tipo de sistema métrico se utiliza en el país donde se enviará el resultado final.
Este traductor experto no traducirá el peso en libras a libras si el público objetivo se encuentra en un país como la India. El traductor sabría que India sigue los kilogramos por peso y traducirá las métricas en consecuencia. Del mismo modo, un traductor experto tendrá en cuenta métricas como una yarda, una milla, un centímetro, una pulgada y otras mientras las traduce.
Falta de imágenes
Una de las imágenes más utilizadas por las empresas que ofrecen guías para reparar un iPhone es la de abrir el tornillo pentalobe que se encuentra en la parte inferior del dispositivo. Esta imagen le dice al usuario dónde está el tornillo y en qué se diferencia de un tornillo de torque. A veces, un documento técnico requerirá una imagen para expresar completamente el punto.
Esto es especialmente relevante con un manual de usuario o una guía que se ofrece para reparar dispositivos en home. Si un traductor se olvida de agregar estas imágenes relevantes, el usuario no solo está confundido acerca del procedimiento, sino que incluso podría terminar dañando el producto. Por lo tanto, un traductor con un conocimiento sólido de la ayuda visual o una agencia que se adhiere a la ayuda textual y visual para documentos técnicos puede eliminar estos errores comunes.
Comprensión de las leyes locales.
Este es otro requisito clave para los traductores de documentos técnicos y uno que se ignora fácilmente. Un lenguaje técnico de uso común en un país bien puede estar prohibido en otro. Los requisitos reglamentarios pueden exigir que el manual del usuario o las instrucciones del usuario tengan un formato predefinido y proporcionen algunas presentaciones obligatorias como parte de las presentaciones.
Esto también es relevante en el contexto de las marcas CE requeridas para juguetes y electrodomésticos dentro del mercado de la UE. A menudo se requiere que estas directivas incluyan advertencias sobre los peligros que podría implicar el uso de un producto. Por lo tanto, es necesario que el traductor siga las leyes locales y el idioma local.
Control de calidad
El último error común, pero no menos importante, es la falta de controles de calidad. Un buen trabajo de traducción no es solo el trabajo de un traductor sino también el trabajo de un corrector de estilo. Algunas agencias de traducción siguen las pautas estrictas de pasar el trabajo por al menos tres pares de ojos antes de aprobarlo y compartirlo con el cliente.
Esto pone el listón realmente alto para la calidad del trabajo de traducción y garantiza que algunos de los errores comunes que surgen al traducir un documento se eliminen en la fuente. También puede ser más económico en términos de la cantidad de veces que se edita el documento.